El primer paso es mezclar la leche y el zumo de limón, de tal forma que la leche se corta (tipo buttercream), y la dejamos reposar unos minutos.
En un bol mezclamos todos los ingredientes secos: la harina, el cacao, el azúcar, el bicarbonato, la levadura química y la sal.
En otro recipiente batimos el aceite, la vainilla, el huevo y la leche con limóh hasta que quede una mezcla homogénea.
Vamos añadiendo cucharadas de mezcla seca en la mezcla líquida hasta que quede todo integrado. A continuación añadimos trozos de chocolate y mezclamos.
Rellenamos las cápsulas por la mitad, y las llevamos al horno caliente a 180º, durante 12 minutos. Y voilà!! Las mejores magdalenas del mundo.