El primer paso es mezclar en un bol el moscatel, el aceite y el anís con unas varillas. A continuación añadimos poco a poco la harina y mezclando. Cuando ya sea una masa lo amasamos con las manos sobre una superfície limpia.
A continuación, cunado la masa sea uniforme, probamos si se rompe al estirarla. Si se rompe debemos añadir un poco de harina.
Cuando esté lista hacemos bolitas para dividirla y tapamos la pasta que no usemos para que no se seque.
Aplanamos cada una de las bolas de pasta de forma circular, y en el centro colocamos una cucharada de relleno, en este caso cabello de ángel. Doblamos la pasta para cerrarla, y cortamos lo que sobra. Lo podemos hacer con un molde de robiol, un vaso o incluso un corta-pastas. Pellizcamos los lados para que no salga el relleno y hacemos dos agujeros con un palillo encima.
Vamos colocando los robiols sobre una bandeja de horno con papel, y cuando esté llena la metemos en el horno caliente a 150º durante 45 minutos.
Justo antes de servir ponemos el azúcar glass por encima, ¡y voilá! La receta más senzilla de robiols sin manteca.