Lo primero es cortar las granadas para sacar los granos. Existen mil formas de hacerlo, pero yo lo primero que hago es cortar la corona de la granada, partirla en cuatro y con una cuchara de madera golpearla por detrás para que los granos se despeguen.
Cuando tenemos todos los granos los metemos en un procesador de alimentos durante unos 30 segundos o hasta sacar todo el jugo.
A continuación colamos todo el zumo con un colador para que no quede ninguna pepita.
Por otro lado, exprimimos las mandarinas y lo mezclamos con el zumo de la granada.
Y voilà! ¡Super rápido y delicioso!